jueves, 28 de diciembre de 2006

De Viaje

Hoy nos hemos levantado pronto. Muy pronto. Creo que eran las seis o algo así. Clara y su familia se han ido de vacaciones por el mediterráneo. Suena genial, ¿verdad? Pues debe ser aun más genial de lo que promete. Durante estos diez días de Rodríguez que me esperan, aprovecharé y estudiaré un poco (se acercan los exámenes), quedaré con viejos amigos que vuelven a Madrid y me iré a dar largos paseos con Tristán y Kaiser. Para aquellos que no los conozcan colgaré sus fotos un día de estos. Son como Epi y Blas pero en perro: Kaiser serio, elegante y callado, Tristán (que debe su nombre al ínclito Bratt Pit en “Leyendas de Pasión”) siempre acelerado y sonriente. Pointer y Cocker. Ya os iré contando …

Bueno, pues el caso es que debían estar a eso de las siete en el aeropuerto (vuelo a Milán a las nueve) así que allí estaba yo, con mi flamante nuevo coche, dándolo todo por las carreteras patrias.
Hemos llegado a tiempo, por supuesto.
Hemos desayunado todos, por supuesto. (Zumo de Naranja con mucha sacarina para mí, por favor)
Casi me pierdo al salir de la T4, por supuesto.

La verdad es que no soy mucho de aeropuertos. No por nada en especial. Simplemente, me parece que los que vamos para no viajar, los que vamos simplemente acompañando, somos expulsados de una manera sibilina de allí. Poco a poco nos hacen ver que sobramos. El punto de embarque está como a cinco mil kilómetros de el avión y, obviamente … allí no puedes pasar … Las tiendas chulas con colonias de marca y ropa elegante están dentro de la zona de embarque y … allí no puedes pasar … Vaya, que parece que llevas un cartel en la espalda que dice “Perdonadme la vida, sólo estoy de pasada” … o, al menos, yo me sentía así … además, para más INRI, sale a relucir mi yo clasista; y es que los aeropuertos están llenos de gente sin estilo. Una nota agradable: todo ese ambiente me han recordado al último disco de Fangoria (fantástico) y eso, cuando salía de la T4, me ha hecho sonreir.

Esta mañana, mientras Clara se duchaba, he sacado a dar un paseo a los perros. Vivimos en un noveno y, claro está, bajamos y subimos en ascensor. Pues bien, al entrar en el bajo para subir con Kaiser y Tristan a casa (yo helado de frío, ellos más contentos que unas castañuelas perrunas) he cerrado la puerta y he pulsado en botón 9. Tras esperar unos segundos y ver que aquello no subía, he vuelto a abrir la puerta por si se había quedado encajada …pues bien, Kaiser ha salido tan pancho y, creyéndose ya arriba, pretendía entrar en la puerta de casa. Sólo que esa no era nuestra casa. Nosotros vivimos nueve pisos arriba … y es que Kaiser, esta mañana, ha usado la lógica del ascensor …

5 comentarios:

Rantam dijo...

¡Ya era lustro! Casi no me lo creía. Parece que han venido los Reyes Magos y finalmente nos han regalado algo de texto en tu 'blog' (perdón por el anglicismo).

Pues si, finalmente te has estrenado, ya era hora. Me ha gustado lo de la lógica del ascensor.

Espero que pongas entradas de cuando en cuanto. Siempre es agradable saber de cosas de las que nunca te acordarás posteriormente de hablar (como la anécdota de ascensor o lo que se te pasa por la cabeza en el aeropuerto).

Nos vemos aquí mismo.

Saludos desde la fria del carajo (pero no por ello menos encantadora) Francia.

Fidelio dijo...

... pues mi intención es publicar cada dos días más o menos ... De todas formas mañana empiezo las vacaciones así que ...

Por cierto, busco voluntarios para ir al concierto de FANGORIA + PET SHOP BOYS del día 5 de Enero. Se recompensará ...

Fernando J. López dijo...

Por partes:
1. Gracias por regalarnos (al fin) tu necesario blog. Ahora solo te queda estrenarte como comentarista en las bitácoras ajenas...
2. Los aeropuertos son uno de los lugares con más marcas (muescas y callejones de bala) en mi biografía. La tristeza suele acompañarlos en despedidas y regresos (dejar atrás algo siempre tiene algo de pérdida) pero su minoritario porcentaje de lugar de huida, evasión y escapismo los convierte en templos irremplazables en esa cosa extraña que llamamos memoria. ¿O era deseo?
3. El día 5 de enero el abajo firmante estará con otros amigos igualmente fangóricos en el concierto del que vuesamerced nos habla... Si se anima a sumarse a este grupo, no tiene más que hacérnoslo saber...
Besos de un ilógico contumaz

La Nena dijo...

y si realmente el ascensor ha efectuado su trabajo de trasladarte en el espacio tiempo????????
pero por vicisitudes del destino has tenido la misma probabilidad de entrar en un agujero negro que te ha devuelto a tu punto de destino, que de coger un avion, irte a alemania, buscar una guia de telefono, escoger un nombre al azar, salir a la callle y preguntar al primero que pase...es acaso usted Wolfang Gruogroooooosssss????

despues de esta reflexion tan profunda, desde el hogar de la Sierra, te mandan un besito un osito panda y una chinita...be water my friend!

Fidelio dijo...

Pues muchas gracias a todos por vuestras aportaciones:

• A Pikolake por su foto de dudoso erotismo pero divertida postura.
• A Ramtan por sus siempre bienvenidos consejos técnicos / sentimentales.
• A Cinephilus por no tener muy claro dónde acaba la memoria y donde empieza el deseo
• A Allende por la sonrisa que seguro se dibujaba en su cara mientras escribía su entrada.
• A Laura por su piropo literario que, viniendo de alguien como ella, es todo un honor.
• … y a todos por que sigamos haciendo de esto algo interesante …